TIEMPO LIBRE (DIFINICCION)

 

Tiempo LibreSe conoce como Tiempo Libre a aquel tiempo que la gente le dedica a aquellas actividades que no corresponden a su trabajo formal ni a tareas domésticas esenciales. Su rasgo diferencial es que se trata de un tiempo recreativo el cual puede ser utilizado por “su titular” a discreción, es decir, a diferencia de lo que ocurre con aquel tiempo no libre en el cual la mayoría de las veces no se puede elegir el tiempo de realización, en este, la persona puede decidir cuántas horas destina

Aunque, el tiempo libre, para algunos, también suele incluir la realización de algunas actividades que aunque no sean laborales pueden revestir algún tipo de obligatoriedad, como ser ir al médico, ir al supermercado, entre otras y que se las realiza en el llamado tiempo libre porque no se dispone de tiempo para hacerlas durante aquellas jornadas en las que domina el trabajo.

Entonces, generalmente, las personas suelen utilizar este tiempo para descansar del trabajo, para llevar a cabo alguna actividad que les reporte recreación, entretenimiento o placer, o como recién indicábamos para hacer aquellas actividades que por falta de tiempo no pueden hacer mientras están en un día laborable.

Ahora bien, será necesario y condición sine quanom que aunque reporte estas cuestiones, la misma lleve impresa una identidad, un sentido, porque si no terminará resultando aburrida, y que además implique disfrute. Difícilmente podamos incluir o categorizar como parte del tiempo libre una actividad que no nos resulte en ningún punto atractiva y placentera.

En otro orden de cosas, es importante destacar que el tiempo libre u ocio, como también se lo suele denominar, es una necesidad típicamente humana. Es habitual que después de una semana agotadora en materia de obligaciones laborales, domésticas o estudiantiles, las personas se procuren la realización de actividades que impliquen únicamente disfrutar, relajarse, de todo aquello que los cansó o agotó en la semana laboral.

En tanto, sobre lo que puede ser considerado una actividad estrictamente inscripta en el tiempo libre variará de persona a persona, porque lisa y llanamente no todos tienen la misma percepción de lo que puede ser divertido, agradable, entretenido o placentero.

Por ejemplo, algunos considerarán que estudiar o leer un libro no puede para nada inscribirse en un tipo de actividad que se hace durante el tiempo libre, sin embargo, habrá seguramente algunos que sí lo consideren actividades entretenidas para desplegar durante su tiempo libre aunque la convención mayormente postule lo contrario.

Por otra parte, el tiempo libre suele estar estrechamente vinculado a aquellas actividades consideradas como más productivas y motivadoras.

Ahora bien, más allá de esta aclaración que bien vale la pena para comprender que no todos podremos considerar o inscribir del mismo modo a una actividad como parte de un cronograma de ocio, es importante mencionar que existen una serie de prácticas que por convención social y desde tiempo inmemoriales están vinculadas al tiempo libre, es decir, se procura realizarlas en los tiempos libres de cada uno, tal es el caso de: ir al cine, al teatro o asistir a cualquier otro tipo de actividad artística o cultural, pasear por el parque, ir a un shopping o centro comercial de compras, salir un día de pic nic, contratar una excursión a alguna zona rural para desplegar diversas actividades que acentúen el contacto directo con la naturaleza, entre otras.

El tiempo libre en la historia

Los orígenes del concepto se remontan a la Grecia antigua en la cual los filósofos destinaban al tiempo libre a aquellas acciones que implicaban el reflexionar sobre la vida, las ciencias y la política.

Por su parte, la civilización romana fue una gran cultivadora del tiempo libre y de la práctica de diversas actividades durante este tiempo. Las elites intelectuales usaban este tiempo para meditar y contemplar, similar a lo que sucedía con los filósofos griegos, mientras tanto, las personas ordinarias se divertían asistiendo a grandes espectáculos o descansando en lo que duraba ese tiempo.

Luego, con la difusión del cristianismo y de una moral cristiana muy cerrada, en la Edad Media , prácticamente las actividades recreativas no eran promovidas.

Entre los siglos XX y XXI ha habido una increíble expansión del llamado Tiempo Libre, lo cual ha provocado una magnífica diversificación a punto tal de distinguirse en diferentes categorías: nocturno (asociado a la noche y a todas aquellas actividades que se desarrollan durante la noche: bares, discos), espectáculos (incluye los culturales y los deportivos), deportivo (supone la práctica de algún deporte).









Pues bien en esta ocasión y ya entrado el año 2022,quería yo rendir un homenaje a mi tierra que es GUADALAJARA (España).Por eso me siento orgulloso de ser Español pero sobre todo de ser ALCARREÑO, Guadalajara es una de las provincias de Castilla la Mancha.

PLANO DE GUADALAJARA.


HISTORIA DE GUADALAJARA.

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Historia

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Detalle de la portada del Palacio del Infantado (Pulse en la imagen para ampliar)La ciudad de Guadalajara fue fundada por los árabes, en algún momento de la segunda mitad del siglo VIII o de la primera mitad del siglo IX. Fue, en principio, una fortaleza en la frontera, emplazada entre el mundo árabe y el mundo cristiano,llamada "Wad-al-Hayara", es decir, "valle de los castillos" o "valle de las piedras". En sus cercanías había existido un emplazamiento romano, cuyo nombre, Arriaca, puede tener el mismo significado. Las excavaciones arqueológicas más recientes revelan en su entorno yacimientos aun más antiguos, del periodo Calcolítico y del Bronce.

La historia de Guadalajara durante la dominación islámica es poco conocida. Proceden de aquella época el puente sobre el río Henares y, en parte, las ruinas del Alcázar, en el camino que sube desde el río hasta el casco viejo de la población. Según parece, la ciudad alcanzó cierto esplendor en el siglo X, en todo caso limitado por su situación en un territorio que casi siempre estuvo en pie de guerra.

En 1085, Guadalajara fue conquistada por el rey castellano Alfonso VI. Las crónicas atribuyen la hazaña a uno de los compañeros del Cid, Alvar Fáñez de Minaya. Desde 1085 hasta la batalla de las Navas de Tolosa en 1212, que causó el retroceso definitivo de los ejércitos musulmanes, la historia de la ciudad refleja el curso de las guerras contra los almorávides y almohades. La nueva población cristiana logró establecerse definitivamente en el territorio y formó una extensa comunidad de pastos, bajo la jurisdicción de Guadalajara, según confirma el fuero concedido por el rey Alfonso VII en 1133.

En 1219, Fernando III concedió un nuevo fuero, el fuero largo, a la ciudad. Durante el reinado de Alfonso X, la protección el rey aseguró el desarrollo económico de la población, mediante la defensa de sus comerciantes y la autorización de sus ferias y mercados, que aún se celebran. En la segunda mitad del siglo XIV se estableció en Guadalajara la familia Mendoza, cuyo destino en adelante marcó el de la ciudad misma. Entre los miembros de esta familia figuran Iñigo López de Mendoza, el marqués de Santillana (1398-1458), y Pedro González de Mendoza (1428-1495), gran cardenal de España y consejero de los Reyes Católicos. El ascenso de los Mendoza, que desde 1475 llevan el título de duques del Infantado, trajo consigo el de la ciudad. La corte señorial actuaba de motor económico de la vida urbana. En 1460, el rey Enrique IV concedió a la población el título de ciudad y aseguró su voto en Cortes. A lo largo del siglo XVI se logró una época de auge.

Mapa histórico (Pulse en la imagen para ampliar)Guadalajara sufrió especialmente las consecuencias de la crisis general del siglo XVII.Los Mendoza trasladaron su sede a Madrid; la quiebra y la despoblación amenazaron la supervivencia de la ciudad. A comienzos del siglo XVIII, Guadalajara, saqueada durante la guerra de Sucesión, vivió su peor momento. El favor del rey Felipe V logró evitar la ruina completa, mediante el establecimiento de la Real Fábrica de Paños, que hasta principios del siglo XIX asegura el crecimiento de la población.

Durante la primera mitad del siglo XIX el desarrollo de la ciudad se detuvo otra vez. Primero, como consecuencia de los daños causados por la guerra de Independencia (1808-1813), después por el cierre de la Real Fábrica de Paños, en 1822. En adelante, hasta la segunda mitad de nuestro siglo, Guadalajara sobrevive gracias a su función administrativa, como capital de provincia y sede de instituciones públicas, entre ellas, la Academia de Ingenieros Militares, desde 1840. El crecimiento, aunque lento, transforma la población, que alcanza los 11.000 habitantes en 1900. La huella de aquella época, de prosperidad relativa, puede verse aún en la arquitectura residencial de la calle Mayor. Con éxito, una generación de profesores y escritores emprende en el tránsito del siglo XIX al XX el fomento cultural y educativo de la población. Se organizaron en torno al Ateneo Caracense y el Centro Volapükista Español, dedicado al fomento del volapük, una lengua universal, antecesora del esperanto.

La falta de desarrollo industrial limitó hasta bien entrado el siglo XX las posibilidades de la ciudad. Después de la Guerra Civil (1936-1939) y hasta 1959 transcurrieron veinte años difíciles. En 1959 Guadalajara fue incluida en los planes de desarrollo como polígono de descongestión industrial de Madrid. Aunque ese desarrollo se ha producido lentamente, la ciudad ha logrado en los últimos años una de los mayores tasas de crecimiento relativo de España.

En la actualidad dos hechos marcan la vida de Guadalajara. En primer lugar, Guadalajara se halla en la periferia del área metropolitana de Madrid, en el extremo del área de expansión urbana e industrial del llamado "corredor del Henares". En segundo lugar, la evolución económica ha provocado una grave despoblación de la provincia. En esta situación, la ciudad se enfrenta, consciente, al riesgo de convertirse en un núcleo marginal de la metrópolis madrileña y lucha por alcanzar un crecimiento equilibrado. Una reciente encuesta sobre la salud de la población revela entre los habitantes un alto grado de satisfacción por su calidad de vida.

TRADICIONES,FIESTAS,COSTUMBRES  DE GUADALAJARA.

Tradiciones

 

Muchos son los alicientes que en los aspectos festivos y costumbristas ofrece la provincia de Guadalajara. Cruce de caminos y tierra de paso, ha sabido asimilar y dar sentido propio a cuantas manifestaciones culturales le han llegado. Buena prueba de ello lo constituye su folclore, entre cuyos ejemplos más destacados puede citarse el variopinto conjunto de las botargas o enmascarados carnavalescos que recorren los pueblos de Humanes de Mohernando, Alarilla, Valdenuño Fernández, Montarrón, Arbancón, Mazuecos, Robledillo de Mohernando, Retiendas, Beleña de Sorbe y Peñalver persiguiendo a las mozas. Tienen especial carácter los botargas-danzantes de San Blas en Albalate de Zorita. Importante y singular participación femenina reciben las fiestas de Santa Agueda en Cogolludo y Espinosa de Henares.

La Semana Santa encuentra en las sencillas procesiones rurales su esencia más genuina, si bien caben ser destacadas por su esplendor y brillantez las de la capital de la provincia. Pueblos como Atienza, Jadraque, Tendilla o Trillo ofrecen este aspecto de su religiosidad. Junto a ellos, Hiendelaencina, donde se teatralizan los "Diálogos de la Pasión", desde hace ya más de treinta años, como en Marchamalo y Fuentelencina, más recientemente.

Muy conocida y no por ello de menor interés es La Caballada de Atienza, que se celebra el Domingo de Pentecostés de cada año, desde hace más de 800 y donde los herederos de aquellos recueros que salvaron al Rey niño Alfonso VIII de caer en las manos de su tío Fernando II de León, mediante una curiosa estratagema, rememoran tal hazaña. En el Santuario de la Vírgen de la Hoz (Ventosa), próximo a Molina de Aragón, y en la misma fecha, tiene lugar la representación de la Loa y su acompañamiento de Danzas, que vienen celebrándose desde fines del siglo XVIII. Autos Sacramentales y Danzas que volvemos a encontrar en Utande (San Acacio) y Valverde de los Arroyos (Octava del Corpus), éste último en un incomparable marco natural, a los pies del Pico Ocejón.

Con motivo de la celebración del Corpus Christi, tiene lugar en Guadalajara la Procesión de los Apóstoles, de orígen secular, gran colorido y vistosidad.

Los Festivales Medievales de Hita constituyen un encuentro con el pasado a través de sus alardes, concentración de botargas y representaciones teatrales.Otras danzas despiden el verano en Majaelrayo, en honor al Santo Niño.

Costumbrismo y arquitectura popular

Y junto a este variado folclore, un costumbrismo que aún puede vivirse y cuyo fiel reflejo queda patente en las colecciones etnográficas del Museo Provincial de Bellas Artes. O en las numerosas fiestas populares de verano en las que el toro es protagonista, en encierros por el campo o las calles de los pueblos y en capeas y novilladas que celebran propios y extraños en los puntos más diferentes de la geografía provincial: Brihuega, Lupiana, Fuentelencina, Atanzón y tantos otros en que se practican, igualmente, deportes y juegos autóctonos como los Bolos Castellanos, la Calva, el Chito, la Burria o el Lanzamiento de Barra y Reja, cada día más en auge.

Y una arquitectura de tipo tradicional, arquitectura sin arquitectos, muy variada, como variadas son las tierras de Guadalajara, su geografía. Casas alcarreñas de mampostería y entramado de madera en Horche y Pastrana. Casas de adobe, tapial y guijarros de río en los pueblos de la Campiña. Casas macizas, con tejados de pizarra y pequeños ventanales, como las de la Sierra, conformando la denominada "Arquitectura Negra". Y casonas de piedra, blasonadas como las del Señorío molinés. Toda una gama aún latente. También viejos santuarios marianos, como los de La Hoz (Ventosa), de la Salud (Barbatona), de Mirabueno, de Ribagorda (Peralejos de las Truchas), de la Peña (Brihuega), de los Enebrales (Tamajón), del Peral de la Dulzura (Budia), de la Esperanza (Durón), del Madroñal (Auñón), de los Olmos (Maranchón), de Valbuena (Cendejas de Padrastro) y un largo etcétera, todos ellos escenarios de romerías y procesiones.

LOS PUEBLOS MAS BONITOS DE GUADALAJARA.

Sigüenza

Ubicado al norte de la provincia, a poco  más de 1000 metros de altitud sobre el nivel del mar, y en plena Serranía de Guadalajara, Sigüenza es un municipio en el que viven unas 4500 personas. Se ubica en un interesante entorno natural, junto a la Sierra Ministra y el río Henares, que nace a 12 kilómetros de su casco urbano.

pueblos bonitos de guadalajara

La historia ha dejado una profunda huella en el municipio, que posee obras tan valiosas como su Castillo, la Catedral de Santa María, el Monasterio de Nuestra Señora de los Huertos, la Casa del Doncel, la Real Casa de Enseñanza y Misericordia, el Castillo de Pelegrin y abundantes iglesias, entre ellas la de San Vicente o la de San Pedro Apóstol.

Su patrimonio natural no le va a la zaga, encontrándose en sus alrededores espacios protegidos tales como el Parque Natural del Barranco del Río Dulce, el Lugar de Interés Comunitario del Valle y salinas del Salado o a Microrreserva de los Saladares de la cuenca del río Salado.

Pastrana

Pastrana es otra bonita población de Guadalajara, situada al sur de la provincia y también en la comarca de La Alcarria, de la cual ostenta la capitalidad. Se ubica a 755 metros de altitud sobre el nivel del mar, rodeada por un bello entorno natural.

Pastrana Guadalajara

La localidad está declarada, y muy merecidamente, Conjunto Histórico-Artístico. Realmente, la historia ha dejado en ella una profunda huella, que se traduce en un patrimonio extenso y de una gran riqueza. Entre sus obras más destacables podemos citar el Palacio Ducal, la Colegiata, la Ermita de los Remedios, la Casa de Moratín, donde residió este prestigioso escritor, o varios conventos fundados por Teresa de Jesús y San Juan de la Cruz.

En Pastrana se pueden también visitar 3 museos: el Museo de Historia Natural, el Museo Parroquial y el Museo Carmelitano.

Atienza

Situada a 1169 metros de altitud sobre el nivel del mar, Atienza es una atractiva localidad  que se halla al norte de la provincia, en plena Serranía de Guadalajara.

La Edad Media fue una época de gran esplendor para esta población, y las entramadas y empinadas callejuelas de su casco antiguo nos lo demuestran. La localidad se halla en la ladera de un cerro, encima del cual se puede ver, aunque en estado ruinoso, el antiguo Castillo de Atienza.

atienza guadalajara

El legado arquitectónico de la población se completa con abundantes iglesias, entre ellas la de San Juan del Mercado, la de Santa María del Rey o la de Nuestra Señora del Val, así como con otras obras, entre las que destacaremos la Ermita de Santa Lucía, la Casa del Cordón o la Casa de los Bravo y Laguna. Además, en Atienza podemos visitar también alguno de sus 4 museos: el Museo de la Santísima Trinidad, el Museo de San Gil, el Museo de la Iglesia de San Bartolomé y el Museo Etnográfico.

Cogolludo

La localidad de Cogolludo, un antiguo señorío de los Duques de Medinaceli, se encuentra en plena Serranía, situada a una altitud de casi 900 metros sobre el nivel del mar, en la ladera de un cerro conocido como El Lomón y junto a los ríos Aliendre y Arbancón.

cogolludo palacio medinaceli

En Cogolludo se pueden visitar las ruinas de su antiguo Castillo, así como el majestuoso Palacio de los Duques de Medinacelli o su hermosa Plaza porticada. También cabe destacar su Iglesia de Santa María, que guarda en su interior una obra del prestigioso pintor José de Ribera, más conocido como El Españoleto.

En sus alrededores encontraremos espacios protegidos de gran belleza y de un enorme interés ecológico, como el Hayedo de Tejera Negra, la Reserva Natural Pico del Lobo o el Parque Natural de Sierra Norte.

Hita

Hita, ubicada a 876 metros de altitud sobre el nivel del mar, se halla en la comarca de La Alcarria, en el centro de la provincia. Forma parte de la Asociación de Los Pueblos más Bonitos de España.

Hita guadalajara

Efectivamente, se trata de una localidad muy atractiva, situada a los pies de una gran muela y atravesada por el río Gaidel, que está declarada Conjunto Histórico-Artístico. En ella podremos admirar obras como sus iglesias, la de San Juan Bautista y la de San Pedro, esta última en estado ruinoso, o como su Puerta de Santa María o su Plaza Mayor, conocida popularmente como Plaza del Arcipreste.

En esta localidad se celebra durante el primer fin de semana de Julio el Festival Medieval de Hita, una fiesta declarada de interés turístico nacional.

Como curiosidad, hemos de saber  que, dentro del término municipal de Hita, en el llamado cerro de Hita, encontraremos un vértice geodésico.

Torija

Torija es otro de los pueblos más bonitos de Guadalajara, perteneciente también a La Alcarria y situado a casi 1000 metros sobre el nivel del mar.

Castillo Torija

Torija posee un legado arquitectónico de una gran riqueza, empezando por obras como su castillo, en el cual se refugió Juan Martín “El Empecinado” durante la Guerra de la Independencia. También hemos de destacar su Iglesia de la Asunción. La localidad acoge además el Museo de Viaje a La Alcarria, el único museo del mundo que está dedicado en su totalidad a un libro, la famosa novela de Camilo José Cela del mismo nombre.

Cifuentes

Cifuentes es una bonita localidad situada en la zona central de la provincia de Guadalajara. Se halla a casi 900 metros de altitud sobre el nivel del mar, rodeada por los bellos escenarios de la comarca de La Alcarria.

Iglesia de San Salvador Cifuentes

Con un censo que no alcanza los 2000 habitantes, Cifuentes posee un patrimonio histórico considerable, con obras tan atractivas como su Castillo, a los pies del cual nace el río del mismo nombre, el río Cifuentes. Paseando por sus calles podremos ver aún otras obras de gran interés, como la Iglesia románica de San Salvador, la Ermita del Remedio y varias casonas.

Valverde de los Arroyos

Valverde de los Arroyos, se ubica al norte de la provincia, a los pies del Pico de Ocejón, a 1255 metros de altitud sobre el nivel del mar y dentro del Parque Natural de la Sierra Norte de Guadalajara. Con un censo que no llega al centenar de habitantes, se trata de un pueblo muy atractivo e interesante, perteneciente a los  Pueblos de la arquitectura Negra, done domina el uso de la pizarra en sus construcciones.

valverde de los arroyos guadalajara

Su entorno natural tiene parajes de gran belleza, como las Chorreras de Despañalagua, un bucólico escenario con una preciosa cascada que alcanza los 80 metros de altitud.

Uceda

Uceda es una población que pertenece a la comarca de la Campiña  de Henares, y que se halla a 778 metros de altitud sobre el nivel del mar, con un censo que ronda los 2600 vecinos. Uceda cuenta con un considerable patrimonio, con obras como la Iglesia de Nuestra Señora de la Varga, la Iglesia románica de Santa María o la muralla, esta última del siglo XI.

Uceda Guadalajara

El entorno de la población tiene parajes de gran belleza, con escenarios pertenecientes a la Alta Campiña, y lugares tan interesantes como la Cueva del Reguerillo, ya en tierras madrileñas.

Molina de Aragón

Molina de Aragón es una atractiva localidad perteneciente a la bella comarca de Señorío de Molina. Se ubica a poco más de 1000 metros de altitud sobre el nivel del mar, en la zona del Alto Tajo. Con un censo que ronda los 3400 habitantes, la localidad es atravesada por el río Gallo, que vierte más adelante sus aguas en el Tajo.

Molina de Aragón

Además de visitar su Museo de Molina, podemos admirar en la localidad obras como su Castillo, el Monasterio de San Francisco o la Iglesia de Santa Clara, conocida también esta última con el nombre de Iglesia de Santa María de San Gil. Otras edificaciones destacables son la Torre de Aragón, la Posada de los Comuneros o el Puente Viejo sobre el río Gallo.

 

Molina de Aragón se encuentra en un atractivo enclave natural, junto al Parque Natural del Alto Tajo, un espacio protegido de gran valor medioambiental y paisajístico, así como los Montes Universales y la Serranía de Cuenca.

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